Cuidados del césped para mantenerlo verde y sano

Mantener un césped verde y saludable es el sueño de todo propietario de jardín. Sin embargo, cada estación presenta desafíos únicos para su cuidado y es importante saber cómo cuidar el césped natural en cada momento del año. Por eso, vamos a detallar unos consejos prácticos para cuidar el césped durante la primavera, el verano, el otoño y el invierno.

De esta manera aprenderás cómo adaptar tus prácticas de cuidado según las necesidades estacionales para asegurarte de que tu césped se mantenga exuberante durante todo el año. Si encuentras dificultades, no dudes en contar con Jardinero Madrid para que nos encarguemos del cuidado del césped.

Cuidados del césped durante la primavera

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La primavera es un momento crucial para el cuidado del césped, ya que es cuando comienza su crecimiento activo después del invierno:

  • Segado del césped. A partir del mes de marzo el césped crece más y para favorecer ese crecimiento y que se mantenga siempre sano hay que segarlo con asiduidad manteniendo una altura de 3.5-5 cm.
  • Abonado del césped. La primavera es el momento perfecto para añadir nutrientes y mantener ese color verde intenso, ya que, si el césped tiene un color amarillento, nos indica que tiene falta de nutrientes y necesitamos abonar el césped para que vuelva a tener un color verde.
  • Fertilizante césped granulado. Un fertilizante de liberación lenta proporciona los nutrientes necesarios durante más tiempo. Recomendamos que contenga nitrógeno, fósforo y potasio.
  • Escarificado del césped. Hay que airear la tierra bajo el césped para que crezca denso y fuerte, por eso, hay que hacer cortes no muy profundos para evitar dañar las raíces de las plantas y eliminando los desniveles del terreno, lo que evita la acumulación de agua en las áreas más bajas y asegurando una distribución uniforme en toda la superficie.
  • Replantación en claros. Para poder replantar las zonas de claros en el césped, primero procedemos a realizar surcos en el terreno utilizando una azada, y luego nivelamos la superficie con un rastrillo. A continuación, compactamos la tierra con un rodillo y utilizamos el rastrillo para separar la capa superior, creando así un espacio adecuado para dispersar las semillas. Una vez que hemos sembrado las semillas, empleamos nuevamente el rastrillo para compactar la tierra junto con las semillas. Es fundamental asegurarnos de que las semillas estén constantemente humedas y no cortar el césped hasta que haya alcanzado una altura mínima de 10 cm.
  • Retirada de malas hierbas. Las malas hierbas de nuestro césped consumen recursos del césped como agua, nutrientes, la luz y el espacio. Además de ser estéticamente desagradables, su proliferación descontrolada crea una sensación de abandono en el entorno. Para eliminarlas se pueden usar herramientas como desbrozadoras o desmalezadoras si las malezas tienen un gran tamaño o quitarlas a mano de manera manual sin son más pequeñas extrayendo la raíz en su totalidad para evitar que vuelvan a salir. También puedes usar herbicidas selectivos para eliminarlas sin dañar el césped.

Cuidados del césped durante el verano

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El verano puede ser un desafío para el césped debido al calor y la falta de lluvia. Estos son los pasos que hay que dar:

  • Creación del mantillo. Cubrir el césped con la propia hierba recién cortada sirve como abono y como protección física contra el sol intenso y la evaporación de agua.
  • Riego. Hay que regar el césped a diario y temprano por la mañana para que se nutran bien las raíces, aunque no con demasiada agua y adaptándola a cada época del año para que no disminuya el oxígeno que hay en la tierra y nuestro césped se vuelva más vulnerable ante plagas y enfermedades.
  • Abono. Se debe seguir abonando el césped como en primavera porque son las estaciones en las que más nutrientes necesitan.
  • Escarificado. Al igual que durante la estación anterior, escarificar el césped ayuda a airear el sustrato para que crezca mejor.

Cuidados del césped durante el otoño

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Las condiciones climáticas del otoño son muy cambiantes, por eso es importante encargarse de las siguientes tareas:

  • Abonado. Llegado el otoño, debe reducirse el abonado, siendo más recomendables los productos ricos en potasio para que el césped sea resistente a los hongos.
  • Retirada de hojas. Hay que quitar las hojas caídas de los árboles regularmente para evitar que bloqueen la luz y el aire.
  • Resiembra. Si el césped presenta áreas dañadas o calvas, en el otoño se puede resembrar y realizar reparaciones necesarias: el clima más fresco y la humedad ayudan con la germinación de las semillas.

Cuidados del césped durante el invierno

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El invierno puede ser una estación desafiante para el césped, especialmente en climas fríos. Aquí tienes algunos consejos para proteger tu césped durante el invierno:

  • Riego. Durante la época de lluvias, hay que reducir todo lo posible el riego para no pudrir las raíces del césped.
  • Nieve. En zonas propensas a las nevadas, se recomienda retirar la nieve acumulada en el césped suavemente para evitar la formación de hongos o la compactación del suelo.

Si no quieres hacerte cargo de esta larga lista de tareas y pretendes que tu césped luzca perfecto durante todo el año, contacta con nosotros. Elaboraremos un presupuesto sin compromiso para encargarnos de tu jardín y restarte molestias.